Lorenza Villalba llegó a Misiones desde pequeña. Enviudó hace cinco años y decidió realizar actividades para despejar su mente. En diciembre recibirá el diploma de culminación de la etapa escolar.

Lorenza Villalba es el reflejo de que nunca es tarde para cumplir metas y sueños. La mujer, que reside en Eldorado, llegó desde Paraguay a muy temprana edad. A los 16 se casó con un empleado de la ex planta Celulosa Argentina de Puerto Piray y enviudó hace cinco años. Con diez hijos y más de 50 nietos, en diciembre recibirá el diploma que certifique la finalización de sus estudios primarios. 

La vecina de la Capital del Trabajo dialogó con La Voz de Misiones y lejos de creer que su vida esté realizada, entre risas y alegría, se definió como una mujer muy feliz. 

Renuevo para el alma

Tras el fallecimiento de su esposo en 2018, Villalba decidió realizar alguna actividad que le ayude a salir de su hogar y despejar su mente de los recuerdos. “No quería pasar quebrantos, quería estar tranquila, pasar un día feliz. No hace mucho que falleció mi hijo mayor, eso me dejó mal también, todas esas cosas hacen que salga de mi casa y me vaya a estudiar, para que me pase ese nervio que tanto tengo”, expresó la abuela.

 Lorenza Villalba durante su clase.

Fue así que a través de la charla con una amiga, conoció a la maestra Silvia, quien sería la encargada de acompañar a Doña Lorenza en sus estudios primarios. Las clases fueron dictadas en un comedor del barrio Ziegler y con la participación de otros estudiantes. “Silvia es muy amable, lindísima, la quiero mucho”, destacó Villalba.

Finalmente, luego de casi seis años de formarse en nivel primario, la abuela, que cumplirá 78 el 5 de septiembre, recibirá su diploma de culminación de estudios.

“Voy a recibir mi diploma, me pone muy feliz y contenta”, manifestó Villalba. Además, se destaca por haber alcanzado muy buenas notas en su libreta de calificaciones.