Ecuador: cuatro días de arremetida narco dejan 178 rehenes en cárceles y 16 muertos

El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, advirtió que no dará el brazo a torcer: "Ceder ante el mal, ¡jamás!, luchar incansablemente ¡siempre!".

A raíz del estallido social que se dio en Ecuador, donde el presidente Daniel Noboa declaró el estado de excepción, ya hay 178 funcionarios carcelarios tomados de rehenes en las prisiones, en cuatro días de violencia. Los narcos llevan 16 muertos en total, tras lanzar una ofensiva con disparos y explosivos.

La explicación del gobierno es que los recientes ataques son una represalia de las organizaciones ilegales, que están integradas por unos 20 mil miembros, en rechazo a sus políticas de mano firme para enderezar el rumbo de un país que hasta hace pocos años era tranquilo. De hecho, en los últimos cinco años, la tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes pasó de 6 a 46 en 2023.

De todas formas, el jefe de Estado, advirtió que no dará el brazo a torcer: «Ceder ante el mal, ¡jamás!, luchar incansablemente ¡siempre!», dijo en alocución el mandatario de 36 años, en el poder desde noviembre.

El martes fue el peor día hasta ahora, donde la ofensiva narco atacó al Canal 10 (TC) en una transmisión en vivo, amenazando con armas de fuego y explosivos a los empleados. Aunque hirieron a dos periodistas, no hubo muertos y trece responsables fueron detenidos, pero la transmisión se detuvo y recién el jueves reanudaron su salida al aire entre lágrimas.

ad
«Quisieron infundir temor, pero despertaron nuestra ira. Creyeron que someterían a todo un país y se olvidaron que las fuerzas armadas están entrenadas para la guerra», dijo el ministro de Defensa Gian Carlo Loffredo, en un mensaje en redes sociales.

Más de 22.400 militares están desplegados, hay patrullajes por tierra, aire y mar, requisas en las calles, operaciones en cárceles y toques de queda.

Una fuga de prisión, el detonante

La crisis comenzó el domingo, cuando uno de los capos más temidos desapareció de su prisión en Guayaquil (suroeste). A la fuga de Adolfo Macías, alias «Fito», jefe de la principal banda criminal del país conocida como Los Choneros, le siguió una arremetida violenta: motines en las cárceles, 178 funcionarios de prisiones retenidos por presos, siete policías secuestrados de los cuales seis ya fueron liberados, ataques con explosivos y vehículos incendiados.

Por la noche del miércoles, la cantidad de muertos aumentó a 16, tras un incendio en una discoteca donde fallecieron dos personas y se produjeron nueve heridos. La policía calificó este ataque de terrorista. «Si se meten con la población, se meten con las Fuerzas Armadas», insistió el ministro de Defensa.

Se reanuda de a poco la actividad en ciudades de Ecuador

Aunque la actividad se reanudó levemente en las principales ciudades, muchos comercios se mantienen cerrados, el transporte público circula con menor frecuencia de la habitual, universidades y escuelas atienden clases de manera virtual y prima el teletrabajo.

La ciudad portuaria de Guayaquil, la más peligrosa del país, retoma paulatinamente su actividad. La principal avenida de la ciudad se veía este jueves sin sus habituales embotellamientos, aunque el confinamiento casi total del día anterior cedió. Algunos comercios prevén abrir media jornada y algunos ciudadanos transitaban las calles camino a sus trabajos, al igual que en Quito.

«Estamos con miedo, con temor que el (momento) menos pensado vuelvan a hacer lo mismo», dijo a la AFP Inés Macas, un ama de casa de 69 años que denunció saqueos en la capital.

Cientos de soldados y policías buscan a Fito, mientras rige un estado de excepción en todo el país, incluidas las penitenciarias, y un toque de queda de seis horas, desde las 23H00 locales.