Gabigol suspendido por dos años por tentativa de fraude en un control antidoping

La situación se dio el 8 de abril de 2023 en el centro de entrenamientos del club de Río de Janeiro. El delantero del Flamengo analiza apelar para que le reduzcan la sanción.

El delantero brasileño Gabriel Barbosa fue sancionado con dos años de suspensión por entorpecer un control antidopaje el 8 de abril de 2023 en el centro de entrenamiento del Flamengo.

Así lo anunció el Tribunal Deportivo Antidopaje en un comunicado que dio por terminado un juicio que mantuvo la tensión en el mundo deportivo de Brasil y el continente, al tratarse de uno de los equipos más importantes que participarán en la próxima Copa Libertadores de América.

La denuncia se realizó en diciembre del año pasado y en una ajustada votación cinco de los nueve jueces decidieron condenar al delantero de Flamengo.

La investigación llegó a su conclusión después de una sesión que se prolongó por poco más de dos horas. La pena para el delantero entró en vigor el 8 de abril de 2023, fecha en la que se realizó el análisis en el Centro de Entrenamiento del Mengao, lo que significa que el goleador tendrá prohibido jugar hasta abril de 2025. Sin embargo, desde el entorno del jugador analizan la posibilidad de apelar a la medida.

El tribunal, en una decisión reñida que terminó con una votación de 5 a 4 a favor de la sanción, encontró a Gabigol culpable de violar el artículo 122 del Código Antidopaje brasileño, que se remite al intento de fraude en cualquier parte del proceso del control de dopaje. Según la normativa, esa violación conlleva una suspensión de hasta cuatro años

Qué pasó en el control antidoping
Gabigol se enfrentaba a un total de cuatro años de suspensión, acusado de violar el Código Brasileño Antidopaje por “fraude o tentativa de fraude de cualquier parte del proceso de un control”. Según la denuncia de la Fiscalía de la Justicia Deportiva, el delantero no respetó los protocolos para la realización de un test e incluso le faltó el respeto a los agentes encargados de recoger ese día las muestras de los jugadores del Flamengo.

El brasileño no quiso someterse al examen antes del entrenamiento, como establece la normativa, se fue a almorzar y solo después aceptó hacerse el análisis de orina, que además entregó de forma irregular, de acuerdo con la querella. El episodio ocurrió un día antes del partido de vuelta de la final del Campeonato Carioca de 2023, que ganó el Fluminense por 4-1 ante su máximo rival, en el arranque de la temporada pasada.

A pesar de que el resultado de la prueba fue negativo, la Justicia Antidopaje ha considerado que la forma de actuar del jugador formado en el Santos se encaja dentro de una tentativa de fraude.