Víctor Kreimer: “Hicimos las cosas bien y por eso avanzamos hacia la reactivación”
“En general, la producción misionera se ha podido sostener. El perfil productivo ha ayudado para que la provincia siga trabajando. Todo esto sostenido por un altísimo grado de responsabilidad de nuestra gente. Los misioneros han entendido que el esfuerzo de cuidarse nos permite avanzar en el mayor grado de normalidad posible dentro de esta coyuntura. Con todas las dificultades que hubo, tenemos que estar satisfechos de que hemos hecho las cosas bien y estamos sanos, que es la cuestión primordial para plantear cualquier tipo de reactivación o salida económica”, completó en una entrevista con ENFOQUE.
Provincia11 de diciembre de 2020Redaccion Multimedios GenesisEstaba en los planes avanzar con la implementación en la provincia de la Agenda 2030 de la ONU, con sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). También darle otra impronta a la Casa de Misiones en Buenos Aires. Y, por supuesto, fortalecer aún más el trabajo articulado entre los distintos ministerios. Sin embargo, algo inesperado cambió los planes del Ministerio de Coordinación de Gabinete: la pandemia del coronavirus. “Fue un año muy particular en el que la agenda que uno tenía pensada se modificó por las urgencias. Estamos finalizando el 2020 con la sensación de que se ha trabajado bien. Fue un año exigente para todas las áreas del Gobierno. Se termina con buenos indicadores sanitarios, con una provincia que en la faz económica ha podido sostener una actividad normal, salvo algunos sectores”, resumió el titular de la cartera, Víctor Kreimer.
Sobre esos meses críticos de marzo y abril, el Ministro recordó que “tuvimos mucha tarea de colaboración con otros ministerios. Nos tocó trabajar mucho con el regreso a casa de los misioneros que habían quedado varados en otros puntos del país, incluso en el exterior. Colaboramos con Salud Pública, con el Ministerio de Gobierno, tanto para los controles sanitarios como para la seguridad de los viajes. Había que darles a los habitantes de la provincia la tranquilidad de que esos misioneros que volvían no iban a representar un riesgo sanitario”.
Añadió que también se articuló “con los ministerios de Industria y de Acción Cooperativa en lo que fue la confección de barbijos y producción de alcohol en gel, en los primeros meses de la cuarentena, cuando conseguir esos productos era complicado y la Provincia encaró un operativo que fue muy importante para fabricar esos insumos. Se aprovechó la mano de obra de nuestra gente para poder tenerlos en la cantidad necesaria”.
El aislamiento social, preventivo y obligatorio generó un parate que golpeó duro. “Estuvimos abocados a la asistencia de las familias. En la primera parte de la pandemia, mucha gente tuvo que dejar de trabajar, necesitó entonces una asistencia hasta con alimentos”, detalló Kreimer.
El traslado de los misioneros varados
La vuelta de los misioneros varados fue una operación compleja. 18 micros trajeron a más de mil personas. “Para cada familia, su caso particular, el de su ser querido varado, era el más importante. Hubo que evaluar de manera permanente, porque había casos de suma urgencia, como gente que había sido derivada a Buenos Aires por cuestiones de salud y en plena pandemia había sido dada de alta. Entonces se quedaba en un lugar lejano, sin alojamiento, sin recursos económicos”, explicó.
“Después aparecieron misioneros que estaban viviendo en otras ciudades y habían quedado sin trabajo y querían volver a su tierra. Fue un trabajo muy exigente desde lo humano. Hubo contención, acompañamiento y muchos trámites por hacer. Había gente que tenía auto, pero no el permiso para regresar. Entonces fue realmente una tarea muy demandante”, apuntó el funcionario.
Kreimer resaltó lo hecho por la “Casa de Misiones, donde se centralizaron los datos y se concentraba la gente para los viajes. Allí se hicieron los controles sanitarios, con médicos de la delegación de Salud Pública en la Capital Federal, que controlaban a cada uno de los pasajeros. Pudimos traer a más de mil personas, son mil soluciones a gente que necesitaba volver a la provincia”.
Asistencia enfocada a la recuperación económica
Kreimer aclaró que “asistencia se sigue dando a los sectores que necesitan, a los más vulnerables. Pero también se está destinando a las actividades que necesitan un impulso para volver a la normalidad. O para dar curso a las oportunidades que abrió esta pandemia, que nos dio la chance de mostrar claramente los números de nuestra economía y la forma en que somos capaces de trabajar, de producir y competir”.
“De la mano de los intendentes cubrimos todas las necesidades a lo largo y a lo ancho del territorio provincial”, remarcó y destacó que esta tarea incluyó la asistencia a distintas comunidades mbya guaraní.
Pero la agenda del Ministerio no se redujo a la asistencia. Ha tenido otros dos ítems preponderantes: la municipalización de Salto Encantado y el avance en Misiones de los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos por la ONU, a los que Argentina adhirió en 2015.
“Lo que se viene desarrollando en Salto Encantado, cuya municipalización fue aprobada por ley este año, es una tarea de suma complejidad. El Ministerio forma parte de la Comisión Asesora para el ordenamiento institucional. Hay mucho por hacer, generar cuerpo normativo, apoyar a la intervención, articular con distintas instituciones. Este proceso de institucionalización va a terminar en el 2023, cuando los vecinos elijan por primera vez a las autoridades comunales”, precisó.
En cuanto a los ODS, “Coordinación de Gabinete es el nodo focal en la provincia. Convocamos a mesas interministeriales, para que empecemos a ver qué se está haciendo en relación a los Objetivos. El objetivo es construir indicadores y empezar a medir, para ver en qué y cómo podemos mejorar. También articular mejor entre distintos organismos”, remató.
Fuente: ENFOQUEMisiones