Empleados de Migraciones apoyaron la posición del gobernador Oscar Herrera Ahuad de mantener cerradas las fronteras de la provincia
Ante los hechos ocurridos en países limítrofes en las últimas semanas, en donde los sistemas sanitarios se encuentran colapsados y en estado de amplio deterioro o desfinanciados, Hugo Osudar, referente de la Agrupación Migratoria Misionera, en diálogo con Multimedios Génesis destacó “por un lado la posición del gobierno nacional de establecer el cierre de fronteras pero por sobre todo la postura del gobernador Oscar Herrera Ahuad de solicitar que se mantenga esa medida ya que existen muchas presiones sobre todo en el ámbito internacional.
Provincia 10 de marzo de 2021 RedacciónAdemás destacó las políticas sanitarias llevadas adelante por el ministro de Salud Pública, Oscar Alarcón.
Nombró dentro de los requisitos esperados para la reapertura la inmunización de la población, además de implementar el mejor protocolo posible a la hora de volver a trasponer las fronteras.
Reflexionó sobre la importancia de a las fronteras abiertas y del vinculo con los paises hermanos, pero remarcó que se trata de una medida sanitaria extraordinaria y que fue acertada.
“El cierre de la frontera, se realiza por una cuestión sanitaria, los esfuerzos del Estado provincial por contener el avance del virus viene siendo el acertado y agradecemos que no se flexibilicen las medidas, al menos hasta tener una población altamente inmunizada.. Además de implementar el mejor protocolo posible para volver a trasponer las fronteras"
Afirmó que sin ambos requisitos (inmunización y protocolos) el crecimiento de casos iba a ser incontrolable.
En cuanto a cuestiones económicas cabe destacar que Misiones cerró el 2020 como la provincia donde se produjo la mayor reactivación económica del país, por la inédita situación de tener las fronteras cerradas con dos gigantes fronterizos, lo cual impidió que el dinero se fugue a ciudades como Encarnación, Ciudad del Este y una docena de localidades del otro lado del río Paraná, donde los precios con frecuencia son más baratos –aún con un peso depreciado–, por la menor presión impositiva y de cargas laborales de los piases vecinos.
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