La Comisión de Trabajo por la Reconstrucción de Nuestra Identidad busca que se incorporen a las dependencias estatales en las que se desempeñaban sus padres cuando fueron secuestrados.
Silvia Labayrú es una de las tres denunciantes en el primer juicio por violencia sexual en la ESMA. En diálogo con Página/12, dice que “las violaciones fueron parte de un plan común en muchos de los campos como forma de arrasamiento de la subjetividad de las secuestradas. Éramos un botín de guerra”. Y detalla: “El Tigre Acosta me dijo que la prueba de que yo no los odiaba era que tenía que aceptar tener relaciones sexuales con algún oficial”.
La secretaria de Derechos Humanos Lucila Puyol anunció ayer el descubrimiento de más documentación de la Policía de Santa Fe del período de la dictadura que está en un ambiente lúgubre --“una habitación cerrada y húmeda”-- en la Guardia de Infantería de Reforzada (GIR), que operó como centro clandestino de detención del terrorismo de estado y hoy es la sede de la Unidad Regional I de La Capital.
