Estudiante misionero transforma tapitas en plástico PET para crear herramientas
Provincia03 de septiembre de 2024Redaccion RMMLogró convertir tapitas en herramientas de trabajo. Con recursos caseros y otros facilitados por su escuela, trabaja en su vivienda y ya piensa en los beneficios que traerá el uso de este material.
Lautaro Rodríguez es un joven oriundo de 25 de Mayo apasionado por el reciclaje. Por este motivo, decidió desarrollar un proyecto que se llevó el protagonismo durante la exposición de proyectos del Instituto de Enseñanza Agropecuario (IEA) N°10. El joven recicla tapitas de plástico y las transforma en plástico PET con el fin de elaborar herramientas rurales.
Desde pequeño, soñó con aprender sobre el reciclaje de plásticos. Este año, con el apoyo de su escuela, logró enfocar su proyecto de fin de año en la transformación de residuos en materiales útiles. “Pude avanzar en la cuestión del reciclaje de plástico de esa manera”, comentó. Y, aunque se trata de un proyecto de fin de año, su potencial ya dio de qué hablar en la comunidad educativa.
El proceso que sigue el estudiante es meticuloso y requiere de varios pasos. Primero, recolecta tapitas de plástico y luego se asegura de que estén limpias. Luego, las coloca en una bandeja de horno aceitada y las funde hasta obtener una masa plástica uniforme. Una vez que el material se enfría, lo trabaja con herramientas proporcionadas por la escuela, y así logra barras lisas de plástico.
Actualmente, Rodríguez recicla tanto Tereftalato de polietileno (PET) como Polietileno de alta densidad (HDPE). Su objetivo es crear varillas para potreros hechas de plástico PET, conocidas por su durabilidad superior. Aunque se enmarca dentro de su proyecto de fin de año, esta creación resulta innovadora y llamó la atención durante la reciente exposición de proyecto que tuvo la IEA N°1.
De qué se trata el reciclaje PET .
El reciclaje de plásticos PET (Tereftalato de polietileno) es un proceso que reutilización de un material ampliamente utilizado en envases de bebidas, alimentos y otros productos de consumo. Conocido por su resistencia, transparencia y capacidad de formar barreras contra el agua y el gas, el PET es un material ideal para el envasado. Sin embargo, su durabilidad también implica que, si no se gestiona adecuadamente, puede tardar cientos de años en descomponerse en el medio ambiente.
Esta práctica permite reducir significativamente la cantidad de residuos plásticos, al reusar materiales que de otro modo terminarían en vertederos. También, conserva recursos naturales y ahorra hasta un 60% de la energía necesaria para producir plástico nuevo a partir de materias primas vírgenes, contribuyendo a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, impulsa la economía circular al reincorporar material reciclado en la cadena de producción.