Francia decretó este viernes el confinamiento de las aves de corral en sus territorios en Europa tras aumentar a "elevado" el riesgo de gripe aviar por la multiplicación de casos en los países vecinos.
Este aumento del nivel de riesgo implica que los criadores encierren a los animales en los gallineros para evitar que entren en contacto con aves migratorias, susceptibles de estar infectadas, como ya hizo Holanda.
El gobierno busca evitar lo ocurrido el pasado invierno, cuando registró casi 500 focos, principalmente en la zona del suroeste famosa por su producción de "foie gras". Más de 3,5 millones de aves, especialmente patos, fueron sacrificadas.
"El aumento de la dinámica de infección en los corredores migratorios justifica que se eleve el nivel de riesgo", a "elevado" en los territorios franceses en Europa, afirma la decisión publicada en el Diario Oficial, de aplicación inmediata.
El Ministerio de Agricultura justificó en un comunicado esta decisión al subrayar los casos registrados en Europa en el Mar del Norte y el Mar Báltico, así como en tres criaderos alemanes y en seis del noreste de Italia.
Francia también registró tres focos de gripe aviar, pero en corrales particulares, en dos departamentos del norte, fronterizos con Bélgica, recordó el ministerio.