El botulismo ya mató a tres y deja hasta ahora diez internados
Salud11 de enero de 2022Redaccion Multimedios GenesisEl caso originado en principio por la ingesta de chacinados que produjeron una intoxicación y terminó llevando a una mujer de 77 años y su hijo de 39 sumó luego un niño de ocho años. Y hay varios más internados en los Samic de Eldorado y Puerto Iguazú
Continúa subiendo el número de personas internadas a raíz de la intoxicación alimentaria por botulismo en Comandante Andresito, y ya son diez los pacientes que están hospitalizados en los Samic de Eldorado y Puerto Iguazú. Ocho de ellos son adultos y dos son niños; entre los afectados, una joven de 24 años debió recibir asistencia respiratoria al complicarse su estado de salud ayer por la mañana y está grave, al igual que un pequeño de 2 años.
Y en la noche del domingo, otra joven de 19 años debió ser conectada a un respirador artificial por su grave estado, en este caso la paciente está en el Samic de Iguazú.
Según lo que confirmó a los medios el Ministerio de Salud Pública, los cinco pacientes que están en Eldorado se encuentran en terapia intensiva (tres adultos y dos niños), mientras que en Iguazú cuatro están en la sala crítica y uno en sala común.
Desde que se conocieron, el jueves, los fallecimientos a causa de lo que ya se confirmó que es la enfermedad, comenzaron a aparecer más personas intoxicadas. El viernes la cartera sanitaria provincial informó cuatro casos, mientras que el sábado se conocieron otros tres y ayer tres intoxicados más.
Por su parte, el sábado por la noche un niño de 8 años, que había ingresado al nosocomio de Eldorado, perdió la vida y se convirtió en la tercera víctima mortal de esta gravísima enfermedad. El chico era vecino de la mujer de 77 años y de su hijo de 39, que fallecieron el jueves.
Todo indica que la intoxicación se habría producido por la ingesta de chacinados (chorizos), que madre e hijo producían de manera casera y compartieron con vecinos y otras personas del pueblo.
Por consecuente, la cartera sanitaria provincial y el municipio trabajaron para localizar a más vecinos de la localidad que lo hayan consumido y presenten síntomas para actuar lo más rápido posible. Se instaló una especie de Centro de Atención Primaria de la Salud (Caps), donde cualquiera podía acercarse a recibir atención médica.
En tanto, durante el viernes se inspeccionaron dos lugares donde posiblemente se elaboraron los chacinados frescos y ahumados con carne de animales de monte y se obtuvieron muestras que se procesaron en el Laboratorio de Aguas y Alimentos del Ministerio de Salud.
El botulismo es una enfermedad rara y grave, ocurre como consecuencia del consumo de ciertos alimentos. Es causada por una toxina que ataca los nervios del cuerpo y puede ocasionar dificultad para respirar, parálisis muscular y hasta la muerte. Con mayor frecuencia la toxina es producida por la bacteria Clostridium botulinum.
Yolanda Katz (77) y su hijo Marcelo Hubscher (39) las primeras víctimas (Foto Clarin).
Según se indicó, casos así no se registraban en la provincia desde hace muchos años. Los últimos casos de intoxicación alimentaria con sospecha de botulismo habían ocurrido en 2018 en Nemesio Parma. Luego de investigaciones y la autopsia de la persona fallecida se determinó que fueron a causa de la presencia de plaguicidas y herbicidas.
Los alimentos que pueden estar contaminados con esta bacteria son las verduras enlatadas en casa, carne de cerdo y jamón curados, el pescado crudo o ahumado, la miel o el jarabe de maíz, las papas al horno cocinadas en papel aluminio, el jugo de zanahoria y el ajo picado conservado en aceite.
A veces la forma de ahumar los productos no es suficiente para eliminar las bacterias.
Por lo general, los signos y síntomas del botulismo transmitido por alimentos comienzan entre 12 y 36 horas después de que la toxina ingresa al cuerpo. Sin embargo, según la cantidad de toxina consumida, el inicio de los síntomas puede variar desde unas pocas horas hasta unos pocos días.
Los tipos de botulismo
Además del botulismo transmitido por los alimentos en la que las bacterias dañinas se reproducen y producen la sustancia tóxica en ambientes con poco oxígeno, como las conservas caseras; existen además otros dos tipos: el botulismo por heridas y el botulismo infantil.
Según explica Mayo Clinic, el primero se da si las bacterias entran en una herida cortante y pueden provocar una infección peligrosa que produce la sustancia tóxica.
El infantil es la forma más común de botulismo y comienza cuando las esporas de la bacteria Clostridium botulinum crecen en el tracto intestinal del bebé. Suele ocurrir a los bebés de 2 a 8 meses de edad.
Muchas veces la bacteria se desarrolla en latas golpeadas y se recomienda no consumirlas
En lo que respecta a lo alimentario, Rosana Mendoza, magíster en Alimentos, había comentado a este medio que las temperaturas que tiene Misiones actualmente propician el crecimiento de las bacterias y por ello hay que tener mucho cuidado en su elaboración, sobre todo si se trata de conservas.
“Para elaborar las conservas hay que cocer bien previamente tanto el alimento como el vinagre o la salmuera y después colocar toda la preparación sin taparla y llevarla a baño maría. Esa es la forma correcta de hacerlo. No es ni siquiera cocinarlo, sino dejarlo apenas unos minutos en agua hirviendo después de haberlos lavado bien. Así se eliminan las bacterias y toxinas”, había dicho.
“Si tienen una especie de gastroenteritis y consumieron algún tipo de conserva o un chacinado puesto al vacío, se debe consultar al médico e informarle qué se comió. Si no se detecta dentro de las doce horas se ha demostrado que tiene el 75% de letalidad esta enfermedad”, había expresado Mendoza, que además es parte del equipo que da el Curso de Higiene y Seguridad para manipuladores de Alimentos, de la Facultad de Ciencias Exactas Químicas y Naturales de la Unam.
Hubscher era un colono que vivía en Andresito junto a su madre. Habrían comido pecarí o tapir.
Síntomas
-Dificultad para tragar o hablar.
-Boca seca.
-Debilidad facial en ambos lados del rostro.
-Visión borrosa o doble.
-Caída de los párpados.
-Problemas para respirar.
-Náuseas, vómitos y calambres abdominales.
-Parálisis.
Cuidados en la cocina
-Cocinar los alimentos completamente.
-Mantener separados los alimentos crudos de los ya cocinados.
-Refrigerar pronto los alimentos preparados.
-No comer de latas abolladas
-La presencia de toxina botulínica no siempre se acompaña de alteraciones en el aspecto, olor o sabor de los alimentos.
-Tratamiento térmico: la olla a presión aumenta la temperatura y es más efectiva.
-Garantizar la higiene: envases, recipientes, utensilios, tablas.
-Evitar productos de dudosa procedencia.
Prevenciones en conservas caseras
La transmisión de la toxina botulínica se asocia al consumo de conservas caseras mal esterilizadas y una cocción inadecuada. Una toxiinfección alimentaria que todos los años cobra alguna víctima a raíz del desconocimiento al prepara conservas caseras.
Bastaría con realizar una cocción con calor de unos 10 minutos para eliminar y destruir la toxina. Por tanto, un adecuado tratamiento térmico o de cocinado ayuda a hacer desaparecer el agente responsable. En la mayoría de los casos, cuando se produce un brote significa que la relación tiempo/temperatura no ha sido la adecuada, es decir, se ha producido un error en el tratamiento. Se calcula que la aplicación de una temperatura de al menos 90 ºC durante 70 minutos es eficaz para eliminar las esporas. Cuanto más alta es la temperatura que se aplica, menos tiempo es necesario que dure el tratamiento. La prevención en la producción industrial de alimentos pasa, por tanto, por el control de los tratamientos térmicos y el rechazo de envases mínimamente abombados, hinchados o deteriorados.
Otro de los alimentos implicados son las conservas caseras, sobre todo carnes o pescados conservados, así como verduras y hortalizas (alubias verdes o espárragos, entre otros). La prevención pasa por la materia prima, que debe ser de calidad, productos frescos, sin golpes ni magulladuras. La higiene es fundamental en todos los pasos, sobre todo la esterilización (se pueden hervir los utensilios durante 15 minutos y después escurrir). Es recomendable envasar las conservas en botes de vidrio, que cierren bien, prepararlas en pequeñas cantidades y en envases poco profundos. Si es muy alto y profundo, pueden quedar capas internas donde no llegue el oxígeno, lo que favorece el crecimiento de Clostridium. Una vez elaboradas, deben almacenarse en condiciones favorables para que se mantengan bien durante largo tiempo; es decir, en lugares donde la temperatura no sobrepase los 30 ºC y no dé la luz del sol de forma directa. Cuanto más protegido esté de la luz, mejor.
Riesgos y precauciones en las conservas caseras
Preparar conservas en casa requiere tiempo, aunque los resultados valen la pena si se siguen con cuidado ciertas normas de higiene en cada uno de sus pasos. Uno de los problemas asociados a las conservas, aunque no es muy común, es el botulismo, una toxiinfección posterior a la ingesta de una toxina producida por Clotridium botulinum. Su origen se debe, sobre todo, a una mala esterilización. Debido a que este microorganismo es sensible al calor (se inactiva entre los 80 ºC y los 115 ºC), es muy importante cocer bien los alimentos que se piense conservar para eliminar las esporas más resistentes del patógeno.