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Eran jóvenes, eran sanos y murieron por coronavirus. Desde hace unos días los retratos de personas fallecidas de tan sólo 20, 30, 40 años, sus historias y los testimonios de sus familiares aparecen en los medios.

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, amenazó con firmar un decreto, en el cual intervendría el país con militares para interrumpir la cuarentena que rige en varias ciudades y estados, que adoptaron esa medida para enfrentar el colapso hospitalario por el COVID-19. Afirmó que no aceptará fallos contrarios a esa medida por parte del Supremo Tribunal Federal.

Así lo indicó el Ministerio de Salud de ese país, que advirtió que 2020 cerró con 2.262 defunciones por coronavirus y este año ya fueron superadas con 3.800 casos en tan solo cuatro meses.

Crece la alarma imprevista en Italia por la rápida difusión a solo 60 kilómetros al sur de Roma, con un área metropolitana de casi cinco millones de personas, de la llamada variante india del Covid-19.

El organismo advirtió en su boletín semanal que las afecciones "aumentaron notablemente" y preocupa el incremento de casos en relación a las nuevas variantes que circulan que, además, "tienen mayor riesgo de hospitalización y mortalidad".

Mientras que Reino Unido suspendió la vacunación a menores de 50 años por demoras en la entrega de dosis, Dinamarca, Hungría y Polonia gestionan vacunas con Israel, Rusia y China ante el incumplimiento de los laboratorios Pfizer, Moderna y AstraZeneca.

Italia es uno de los países más a afectado por la pandemia.